Saturday, September 30, 2023

¡Ay de ustedes

Y El dijo: ¡Ay también de vosotros, intérpretes de la ley!, porque cargáis a los hombres con cargas difíciles de llevar, y vosotros ni siquiera tocáis las cargas con uno de vuestros dedos. - Lucas 11:46 (LBLA)

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En esta porción del Evangelio, Jesús utiliza palabras bastante fuertes, que su uso podría considerarse no apropiado para su imagen o para cualquiera que se llame cristiano. ¿Acaso Jesús no pide a las personas que sean amables unos con otros?, ¿No es el cristianismo una religión de personas agradables y pacíficas que no dirán nada hiriente? Algunos podrían pensar que es así, pero no es del todo cierto.

Es cierto, Jesús nos llama a amarnos los unos a los otros, pero eso no significa simplemente ser una "buena persona". A veces, necesitamos decir cosas duras o crudas porque de eso se trata el amor, de querer el bien del otro, y eso es lo que el amor nos llama a hacer. No debemos permanecer ciegos y sordos a las acciones y palabras de otros, sobre todo cuando necesitan un llamado de atención a la reflexión o que esas acciones sean corregidas. No debemos fingir que todo está bien, cuando en realidad no lo es. Debemos reaccionar, incluso utilizar palabras fuertes, si es eso lo que se necesita, por amor.

Claro que esto no es nada fácil. Muchos de nosotros podríamos preferir ignorar el problema, fingir que todo está bien en lugar de pronunciar palabras correctivas y posiblemente hirientes.  Sabemos que la reacción probablemente no será amistosa. Las personas podrían enojarse, ser hostiles y oponerse, tal como los fariseos que conspiraron contra Jesús. Por tanto, necesitamos tener coraje y Jesús nos lo dará.

Jesús nos dio el ejemplo de cómo se debe amar y debemos seguir ese ejemplo. Esto a menudo es difícil. El amor no es sólo algo dulce y agradable. Como Jesús nos amó hasta la muerte, y muerte en la cruz, nosotros también debemos esforzarnos por amar como Él lo hizo, independientemente de las reacciones de aquellos a quienes debemos amar.

Reflexión sobre Lucas 11: 37-54 por Agata Wierzbowska
(Escucha el podcast aquí)

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